Quiénes osarían votar NO en el Plebiscito para refrendar el Cese Bilateral de Fuegos y un Acuerdo General para alcanzar la Paz después de sufrir más de 60 años de guerra cruel y fratricida?
Sólo los locos que han hecho de la guerra y la carroña su modo de vida.
Sólo los que han hecho de la corrupción su forma de ganar dinero, al estilo de los corruptos cuyos escándalosos fraudes llenan diariamente los titulares de sus propios periódicos y noticieros de radio y TV.
Sólo los narco-paramilitares que han anegado de sangre inocente los campos y ciudades colombianas, llevados de la mano de los militares que han aplicado al pie de la letra el Terrorismo de Estado de la DSN, recetada por los gobiernos de los Estados Unidos de Norteamérica.
Sólo los funcionarios estatales que solo tienen en la guerra la forma de esconder sus corruptas prácticas. Al estilo Ordóñez y compañía.
Los ganaderos, los "empresarios del campo", los usurpadores de tierras civilizadas con ingentes esfuerzos de los campesinos que solo tienen como única forma de aumentar sus tierras y su capital adelantar la guerra, forma única de acumular capital en la usurpación y despojo. Al estilo de Lafaurie y la caterva de asesinos que lo secundan.
Sólo aquellos que hacen la guerra, pero nunca la han vivido "en carne propia" ya que ni ellos ni sus hijos han ni siquiera prestado el Servicio Militar Obligatorio y obligan a los militares a reclutar forzosamente a los jóvenes pobres a ir a la guerra, a pelear una guerra ajena, una guerra peleada por pellejo ajeno.
En resumen, votarían el No en el Plebiscito el escaso 10% de los colombianos anteriormente enumerados que por intereses mezquinos y los que por ser mentalmente despistados apuestan por una guerra fratricida porque en "río revuelto, ganancia de fraudulentos pescadores".
A todos ellos, los llamamos por una única vez en su vida a pensar con sentido de Patria y ponerse la mano en el lado izquierdo del pecho -o en el derecho si les causa escozor- y pensar si no sería mejor vivir en una Colombia en la que sus hijos pobres no se estén destrozando sus vidas por una guerra ajena.
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