Sin autoridad por parte del gobierno, las bandas criminales –Clan del golfo, Los pachelly- y el ELN se han tomado las zonas. Hay miedo. Informe Fund. Pares
Las Farc operaban en 242 municipios. Con los 89 grupos que tenía el ELN eran 281 municipios los que tenían presencia guerrillera en Colombia. En enero del 2017 las Farc se asentaron en los puntos de preagrupamiento. Es decir, su área de influencia pasó de 242 municipios a 26 veredas. Desocuparon poco más del 98 por ciento del territorio que ocupaban.
En el afán de dar por terminado el Proceso de Paz el gobierno no le dio tanta importancia a ese vacío de poder que se iba a generar por el preagrupamiento de las Farc. No se previó que ese territorio abandonado iba a ser ocupado por otras bandas criminales, simple delincuencia común, EPL, o el ELN. La presencia de este grupo guerrillero se ha sentido en Chocó, Arauca y Catatumbo. El Clan del golfo está mandando en el Bajo Cauca Antioqueño y en todo el Pacífico. Los Pachelly, un remanente de la Oficina de Envigado, hace presencia en Ituango.
En los únicos departamentos donde se ha copado con presencia militar ha sido el Huila. En otros, como en el Tolima, la anarquía es total. Lo que está amenazando a la paz en esas regiones es precisamente la ausencia de poder.
En este informe de la fundación Paz y Reconciliación se le toma el pulso al país después de haber terminado un conflicto de 65 años.
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