Cambio Total*
En muchos “analistas” de los diarios en poder de la oligarquía
traslucen que ya el proceso de paz se acabó con la dejación de armas por parte
de las FARC-EP.
Evidentemente que
piensan con el deseo. O quizá ese era su propósito con las negociaciones
en Las Habana. Su pretensión era
desarmar a las FARC. Una vez cumplido ese objetivo, lo demás les importa un
sieso.
Mas hay sectores
importantes de la vida nacional e internacional que entienden muy bien que un
proceso de Paz va mucho más allá de la dejación de las armas.
Las armas son una
herramienta para alcanzar determinados objetivos, sobre todo si la parte
contraria no deja espacios para la acción político-social del pueblo. Fue lo
que sucedió en Colombia por más de 60 años.
La llamada violencia partidista
del conservatismo iniciada unos años antes del asesinato de Jorge Eliécer
Gaitán fue respondida por el partido liberal con la conformación de las
guerrillas, las cuales cumplido el objetivo de la repartición del poder entre
los partidos liberal y conservador –Frente Nacional- fueron traicionadas y
asesinado su máximo líder, Guadalupe Salcedo.
Ahora pareciera que la
situación tiende a repetirse. Los sectores en el poder se sienten
satisfechos y hasta hablan “bien” del cumplimiento del Acuerdo Final por parte
de las FARC. Mas ellos no parecen interesados en cumplir su parte. Vemos la
paquidermia estatal en el cumplimiento de la parte que a ellos corresponde.
Los incumplimientos son
protuberantes. No aplicación de la ley de Amnistía promulgada
hace más de 6 meses excusándose en marullería por parte de los ”jueces de la república”.
No aplicación que originó la Huelga de Hambre de los prisioneros guerrilleros, también
realizada por uno de los miembros del Secretariado en apoyo de aquellos, lo
cual ha demostrado que la acción política de las bases muchas veces sobrepasa
los cálculos del bloque en el poder e, inclusive, la de los propios comandantes
de las FARC.
Es vergonzoso para un gobierno –todos sabemos que no tienen
vergüenza- que en implementación del Acuerdo de Paz -en plena dejación de armas-
el pueblo tenga que realizar acciones de masas para exigir el cumplimiento de los
firmado nada más hace menos de seis meses.
En dónde está el cumplimiento del gobierno? Del total del
estado?
Viene después de la dejación de armas por parte de las FARC
el cumplimiento cabal de la parte correspondiente al gobierno Santos y al
estado. Terminación de construcción
de los campamentos, dotación de tierras no solo a los guerrilleros campesinos
que adelantarán los proyectos productivos cooperativos sino a todos los
campesinos sin tierra que la requieren para subsistir.
Igualmente continuar con
la Reforma Política y continuar invirtiendo en programas sociales. Estatuto de
Oposición. Que no nos maten por ser de izquierda o luchador popular. Que los
exiliados políticos regresen al país en condiciones de dignidad y que no sean
estigmatizados por las autoridades de migración y de servicios secretos.
Así podríamos emborronar
cuartillas señalando la deuda social que el estado tiene con el pueblo
colombiano. Creo que si el gobierno Santos es serio se dará prisa en cumplir lo
único que su gobierno tiene para mostrar y que le valió el Nobel, la Paz.
Estamos apenas
arrancando en la construcción de la Paz. Nuestro pueblo debe también continuar
con las acciones de masas en favor del cumplimiento de la Implementación del
Acuerdo de Paz. Que la pasividad y el creer lo propagandizado por los diarios
mediáticos burgueses no nos lleven a creer que “ya estamos en Paz”.
Definitivamente no
estamos en paz, todavía. Es necesario –imprescindible diría yo- combatir y desmontar
el Terrorismo de Estado y su narco-paramilitarismo que ya ha producido más de
200 líderes populares ejecutados –asesinados- desde noviembre de 2016 hasta hoy.
El estado tiene la fuerza para ello, sobre todo ahora que no existe la
guerrilla de las FARC la cual le comprometía gran parte de su energía
operacional.
Llamamos al
acompañamiento internacional en ésta fase de implementación, así como la hubo
en la fase de negociación. Apenas comenzamos el recorrido de lo tejido entre
las FARC y el gobierno Santos.
Que la sangre de
nuestros líderes continúe corriendo en sus venas y arterias para enriquecer no
nuestro suelo patrio, sino para enriquecer una Colombia que merece vivir en Paz
con justicia social.
* HVT Postales de Estocolmo @nandovanegastol
Publicar un comentario