Allende La Paz, Cambio Total.
Nos embarga una sensación de liviandad y satisfacción con el
premio entregado a Dick Emanuelsson, Sub-director de ANNCOL y corresponsal
sueco en Latinoamérica, por parte del Festival de Cine y Derechos Humanos en
Barcelona.
Liviandad porque han sido años, décadas, de persecución de
Emanuelsson por parte del Estado colombiano, en razón de sus denuncias contra
el Terrorismo de Estado que practican los gobernantes colombianos. Hoy éste
premio demuestra que por pedregoso que sea el camino, el verdadero periodista
tiene que recorrerlo paso a paso.
Nosotros, los que nos hemos forjado a su lado, sentimos un
cosquilleo de orgullo por éste premio y nuestra satisfacción la vivimos rayana
en la felicidad que nos produce la lucha por los derechos humanos de los
pueblos latinoamericanos, en especial del pueblo colombiano.
Dick ha vivido páginas impresionantes y riesgosas para
llevar a los lectores la voz de los que han pretendido ser silenciados. Lo
hemos visto a ”lomo de mula” o a pié, con su morral de periodista cargado de hsitorias, atravesando la agreste geografía de
Colombia o la selva inhóspita para entrevistar a los comandantes guerrilleros
de las FARC-EP y el ELN. Lo hemos visto en los más impensados sitios, siempre
al lado de los luchadores populares.
Dick ha sido el corresponsal sueco que llegaba a todos los
rincones de Colombia, incluso sectores de la oligarquía creían que él era una
invención de la guerrilla. Su sorpresa fue mayúscula al verlo en carne y hueso
en una conferencia de prensa en el Palacio de Nariño, el palacio presidencial
de Colombia.
Por ello, se ganó gratuitamente el odio de los que detentan
el poder en Colombia, en especial esa élite que ha hecho del asesinato del
diferente, del contradictor político, la forma de mantenerse en el poder y que
siempre han pretendido acallar las voces de inconformidad que ante el riesgo de
sus vidas han tenido que optar por la única opción valedera de vida.
En la medida que más lo atacaban los enemigos del pueblo,
más nos convencíamos de la justeza de la lucha de Emanuelsson, y más reafirmaba
nuestro compromiso: ser periodistas alternativos, con una inquebrantable
formación ético-política.
Dick, hermano, colega, va para ti un fuerte abrazo de
congratulación desde tu patria, la que tuvo a bien acogernos y salvar nuestras
vidas del Terrorismo de Estado, para encontrarnos contigo y continuar nuestro
desarrollo como periodistas alternativos.
Salud!
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