Allende La Paz,
Cambio Total.
Del 2 al 16 de
octubre se está realizando la jornada mundial de protección de las semillas
contra los intentos de la multinacional Mon-Santo de apropiarse de un
conocimiento milenario. Nuestros pueblos ancestrales fueron seleccionando las
mejores semillas y, como en el caso del maíz, fueron siendo cultivados en
diferentes climas y alturas en una verdadera obra de ingeniería agrícola.
Hoy ese
conocimiento milenario pretende ser robado por las multinacionales,
especialmente por Mon-Santo. Una multinacional que no solo se quiere apropiar
de los conocimientos milenarios, sino también que asperja el tóxico más
devastador para un ecosistema que el Glifosato enriquecido, el cual una vez
asperjado se impregna en la tierra, en las aguas superficiales y subterráneas,
de tal manera que hasta después de 40 años aún se encuentra el veneno.
Las mentiras de
la Mon-Santo son del tenor de las mentiras propaladas en su momento con el DDT,
el cyual dizque no producía daños a la salud de las personas y se han
encontrado todavía hoy el veneno en los cuerpos de las personas que recibieron
la aspersión.
Esos intentos de
la Mon-Santo nos recuerda el robo de los genes de los indígenas de la Amazonía
por parte de « científicos » estadounidenses.
Así se roban no
solo nuestras riquezas, sino que se roban nuestra propia vida. Al destruir o
guardar las semillas desarrolladas por los indígenas y campesinos nos
convierten en « desechables » ya que ellos, los poderosos del mundo,
si tendrán semillas con las cuales refertilizar la tierra en caso de una
trag3edia nuclear en el mundo.
Mas esos intentos
chocan contra el sentir de los pueblos. Nuestros pueblos saben las maneras en
que pretenden exterminarnos de la tierra, como bien lo plantea Susan George.
Los pueblos hemos dicho y lo seguiremos haciendo que nuestra vida no está en
venta. Por ello luchamos y resistimos el Terrorismo de Estado que por orden del
imperio estadounidense aplican para hacer desaparecer de la faz de la tierra la
« semilla » de los comunistas y de los luchadores populares.
Por ello desarrollan
–como en efecto lo están haciendo- toda clase de protestas. La de ésta semana,
citada por Vandania Shiva, es muestra elocuente del poder de los pueblo. Todos
protestaremos por nuestras semillas, especialmente en Colombia en donde el
gobierno de JM Santos pretendía favorecer a la Mon-Santo con el decreto 9,70
que prohibía a los campesinos guardar e intercambiar semillas, sus propias
semillas, y tenían que comprar las estériles semillas de Mon-Santo.
Esos intentos
asesinos de la Mon-Santo cuenta con la complicidad de la oligarquía asesina
colombiana, la cual mira imperturbable el asesinatos de los hijos de campesinos
e indígenas, incluso ellos mismos se encargan de asesinar a los que osan
protestar, como sucedió en el reciente Paro Nacional Agrario y Popular
asesinados por las fuerzas militares-narcoparamilitares estatales.
En éstas jornadas
nuestro pueblo desarrollará la mas amplia denuncia y desarrollará acciones
prácticas que desafiarán el poder oliogárquico en Colombia y el poder
extranjerizante de la Mon-Santo.
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