Domínico Nadal, El
Cuento de la Semana.
Era un país tan
corrupto, pero tan corrupto que el Fiscal Anti-corrupción nombrado por el Fiscal general, NHM, resultó
corrompido…
El fiscal general Néstor
Humberto Martínez con frase rimbombante definió el objetivo central de su labor
en la Fiscalía: “Que tiemblen los corruptos”.
No sabía que el primero
que temblaría sería él mismo y que por ello salió corriendo –cual cobarde
corrupto- a internarse en una Clínica privada para escaparse de los
cuestionamientos en su contra.
Es que el Fiscal General
ha dado muestras de ser corrompido. En el escándalo de Odebrecht no ha actuado
con la contundencia y transparencia que su alto rango promote. Por el
contrario. Allí ha dilatado las investigaciones y todo se reduce a frases
huecas. No hay investigaciones –y si las hay las hay en sentido contrario-
contra Óscar Iván Zuluaga –del CD-, comprometido en ese escándalo. No hay
investigaciones contra el partido Cambio Radical de Vargas Lleras –partido en
el que milita el Fiscal-.
Igualmente ha pasado de
agache para investigar a su anterior –todavía?- jefe, Luis Carlos Sarmiento
Angulo, quien mediante artimañas se apropió de 22.000 hectáreas de los
terrernos Valdíos, los cuales son –por Ley- para aligerar la situación de
campesinos sin tierras.
Como “el palo no está
para cucharas”, al Fiscal General le explota en la cara –por cuenta de la DEA-
el escándalo del Fiscal Anti-corrupción comprometido en el escándalo Lyons –otro
corrupto-, es decir, el fiscal anticorrupción corrupto!
La responsabilidad del
nombramiento del fiscal anticorrupción recae sobre el Fiscal General. Él lo
nombró, entonces él es responsible de ese nombramiento. Claro que en Colombia
ningún cargo se da sin recomendación política. Esa responsabilidad política es
del partido Cambio Radical de Vargas Lleras, partido en el cual milita el
Fiscal General.
Tremenda trama corrupta. Tú militas en mi partido, haces
nombrar a gente del partido, y si salen en escándalos tú no respondes. Igual
hace el número 82! Igual ha hecho siempre Vargas Lleras!
Pues no. No nos da la
gana! El Fiscal General, Salustiano, perdón, Néstor Humberto, tiene que
responder –por lo menos políticamente- por sus acciones. Ahora, conociendo como
conocemos la cadena de la corrupción, no alcanzamos a vislumbrar si algunos de
esos corruptos dólares llegaron a los bolsillos del Fiscal General. No sería
extraño.
El Fiscal General tiene
que responder. Debe responder ya que su administración está corrompida y
debería él mismo ser consecuente con su palabra: “Que tiemblen los corruptos”!
Que tiemblen y que renuncien!!!
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