Allende La Paz, Cambio Total.
El presidente Juan Manuel Santos hablará en la ONU de ”su”
modelo de Paz. O sea, del modelo como lo visualizan los oligarcas y los
militaristas de derecha y extrema-derecha –y también los mafiosos!-. No será
sobre la Paz que se plantea en la Mesa de La Habana porque ésta todavía no ha
llegado a un acuerdo sobre lo ”fundamental”, que es decir, sobre el modelo
económico, la tenencia de la tierra, el Terrorismo de Estado, las violaciones
de Derechos Humanos, los derechos políticos de la oposición popular, etc.
Allí, casi con seguridad, hablará que el Estado no es
responsable de las violaciones de derechos humanos de las víctimas del
Terrorismo de Estado (6,5 millones de colombianos), hablará de lo sólida que
está la economía colombiana, etc, etc, pero nunca reconocerá sus pecados
mortales, o sea, que por lo menos el 85% de las víctimas son responsabilidad
del Estado, que la situación social no da espera y está a punto de colapsar,
que los campesinos ya no aguantan más los incumplimientos del gobierno y exigen
las Zonas de Reserva Campesina, que los pobres colombianos carecen de salud,
que hay oficialmente detectados 1´900.000 niños que no van a las escuela, que
el 17 por mil de los nacidos vivos mueren antes de los 5 años, que la
Mortalidad Materna está por las nubes, y que todavía, todavía!, los niños y
también los adultos se mueren en los ”paseos de la muerte”.
Este rápido recorderis –faltan muchos puntos todavía- nos
hace confirmar que Colombia es el tercer país más desigual de Latinoamérica.
Mas sin embargo, Santos no será capaz de reconocerlo y por el contrario le echará
las culpas –como siempre- al conflicto interno, conflicto que ellos mismos, su
clase oligárquica, desató bajo la égida del imperio estadounidense.
Las FARC-EP serán culpabilizadas por los 7 policías que
murieron en éstos días por la confrontación armada, pero Santos no dirá que él,
su gobierno y su clase oligárquica, no quiere acordar un Cese de Fuegos porque
ellos creen que las FARC están en el ”fin del fin”, fin que nunca tiene fin y
todavía tienen la esperanza de un triunfo por la vía militar, demostrando ”la
combinación de todas las formas de lucha” que adelanta la oligarquía desde toda
la vida y que el pueblo elaboró y la aplicó enfrentando de igual a igual cada
forma de lucha.
La Comundiad Internacional debería mirar con ojos agudos lo
que propone Santos. El pueblo colombiano necesita construir una Nueva Colombia,
en paz con justicia social, libertad, democracia, independencia y soberanía
nacional.
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