José María Carbonell, Cambio Total.
Quiso desmarcarse de su jefe. Uribhitler. Lo
intentó. O eso nos hizo creer. Mas no le alcanzó ni para el respao, según el decir de
Domínico.
Se presentó como el « presidente de la Paz ».
Quiso en sus deseos oníricos ser un « hombre paz » que le permitiera
ganar el « premio Nobel de Paz ». Pero no tiene el poder del capataz
del imperio que sí lo ganó por lo que iba a hacer por la paz a través de más
guerra. Así que al tiempo que se adelanta el show adelanta la guerra contra el
pueblo.
La realidad hace que las máscaras se caigan. No es un
hombre de paz. Es un administrador de la guerra. Para ello lo tienen allí.
Mientras al pueblo campesino y minero le recetan plomo y más plomo, y se los
dan, ya van 4 muertos, el « hombre de negro » prepara mejor su
maquinaria de guerra. No es suficiente con la Asesoría » del más poderoso
aparato militar de la historia. Tampoco con la presencia de sus militares en
las bases del Plan Colombia.
Quiere los « drones » para parecerse a
USAmérica y a la OTAN. Quiere sus aparatos de muerte para asesinar impúnemente
a los campesinos e indígenas que se oponen a sus designios y protestan contra
él. Porque al fin de cuentas eso hacen los drones. Ellos no tienen cerebro para
distinguir entre combatientes y no combatientes. Aunque sus otros aparatos de
guerra –los mercenarios militares y policías- tampoco distingan entre uno y
otro.
Se sentará en el trono de la « Casa de Nari » y
mirará embelesado su retrato. Un retrato con un hocico de cerdo. Mas él se vé
bonito. Y se cree elegido para altos destinos. Es el « presidente de la
Paz », pero sólo le alcanza para hacer la guerra. Cobardemente, claro
está. Porque ni su hijo ni él mismo son capaces de ir a la guerra. Así lo
disfracen con pintura de carnaval para que no lo identifiquen y lo pongan a
marchar en desfiles militares.
Mas él sabe que cada día que pasa le demuestra que es
igualito a Uribhitler. Demócrata ? Ni el pelo. Liberal ? Quizá lo era
su abuelo. Sátrapa ? Totalmente. Así era Uribhitler. Así han sido sus
sucesores... Así se lo demuestran los campesinos y los mineros que hacen que su
careta se caiga rota en pedazos y sólo quede el horripilante rostro del
diablito. Así se lo demuestran la lucha de clases que se alza contra toda
propuesta de conciliación de parte de la oligarquía. El pueblo lucha con
sentido clasista por sus propios intereses, la liberación, la democracia popular,
la soberanía nacional y la justicia.
Quiso ser un « hombre de paz », pero al hacer
la guerra se condenó a sí mismo. No fue capaz de ver que la Paz se hace con
gestos de Paz. Y que la guerra se hace asesinando a sus semejantes. Y para
asesinar sin que « sus manos se llenen de sangre » compra drones a
Israel. Así también quería –y lo hizo- su primo como Vice, hacer la guerra sin
que se le llenaran las manos de sangre porque él, él le tiene miedo a la sangre !
Cada día que pasa se parece más...
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