Alberto Pinzón Sánchez
La reacción
enardecida, pletórica de un provincialismo latifundista del siglo XIX,
con el que la clase dominante y dirigente de Colombia (también llamada
por Jorge Eliécer Gaitán Oligarquía Vendepatria) ha recibido el reciente
fallo de la Corte Internacional de Justicia de la Haya sobre el
diferendo colombo- nicaragüense; lo único que está demostrando al mundo
es la caducidad política y la ignorancia de esta clase montada en el
Poder por el general Francisco de Paula Santander en 1830, a la muerte
del Libertador, y que desde entonces ha regido a sangre, fuego y
demagogia, los destinos de Colombia.
Las
dos fracciones de esta clase social dominante, que actualmente están
enfrentadas por intereses sobre la renta de la tierra, nudo gordiano de
la estructura económica de Colombia, tienen también diferencias
políticas de matices en cuanto a dicho fallo: Una fracción liderada por
el gamonal de las sombras Uribe Vélez, quien haciendo causa común con el
actual ministro de defensa Pinzón el bueno, ha iniciado desde ya una
campaña retrógrada, aislacionista y mentirosa para desconocer el fallo
proferido en la Haya, “asumiendo todas las consecuencias” que se puedan
derivar del uso de las armas contra el hermano pueblo nicaragüense, al
que tildan de caterva de comunistas. La otra, la dirigida por el
presidente Santos, sus ministros y políticos bipartidistas de la Unidad
Nacional, tratando de ganar un tiempo perdido o de corregir un error con
otro más grande, como si fueran un avestruz; proponen en el máximo
grado de la ignorancia diplomática y oscurantismo político, meter la
cabeza en la arena y retirarse de la Corte Internacional de Justicia y
demás organismos internacionales, como si con ello se suspendiera el
fallo emitido y se regresara al pasado feliz; argumentando con una
simpleza de colegiala que; “!Nicaragua va por más. Va por San Andrés!”,
tal y como lo acaba de decir sin rubor la canciller Holguín, en el
“recinto sagrado de la democracia colombiana”.
Ignorancia supina que oculta deliberadamente dos cosas:
1- La definición tan diciente como simple que de si misma da la CIJ:
“La Corte Internacional de Justicia es el órgano judicial principal de
la Organización de las Naciones Unidas (ONU) Está encargada de decidir
conforme al Derecho Internacional las controversias de orden jurídico
entre Estados y de emitir opiniones consultivas respecto a cuestiones
jurídicas que pueden serle sometidas por órganos o instituciones
especializadas de la ONU” . http://www.icj-cij.org/homepage/sp/
2- El carácter de sus miembros y de sus fallos internacionales: ...
“Pueden recurrir a la Corte, en materia contenciosa, todos los Estados
que sean parte en su Estatuto, lo que incluye automáticamente a todos los Miembros de las Naciones Unidas.
Un Estado que no sea Miembro de las Naciones Unidas puede llegar a ser
parte en el Estatuto de la Corte en las condiciones que en cada caso
determine la Asamblea General de la ONU por recomendación del Consejo de
Seguridad. Nauru es el único Estado no Miembro que es parte en el
Estatuto.
En lo que concierne a las partes, un juicio de la Corte es vinculante, final y sin posibilidad de apelación y,
como consecuencia de la firma de la Carta de las Naciones Unidas, cada
Estado Miembro de las Naciones Unidas (ONU) se compromete
automáticamente a obedecer cualquier sentencia de la Corte Internacional
de Justicia en un asunto en el cual sea parte. Asimismo, la Carta de
las Naciones Unidas contempla en su artículo 94 párrafo segundo la
posibilidad de los Estados de recurrir frente a un incumplimiento de una
resolución de la Corte al Consejo de Seguridad, el cual tiene la
potestad de hacer recomendaciones o dictar medidas con el fin de que se
cumpla lo fallado por parte de la Corte en el caso particular”. http://es.wikipedia.org/wiki/Corte_Internacional_de_Justicia
Mientras los mal llamados “padres legisladores de la patria” se debaten
en un verdadero esperpento diplomático, construcción máxima de la
demagogia oligárquica colombiana, que retraerá nuestro país al siglo
XIX; han desconocido que la Corte Internacional de Justicia de
conformación Trasnacional (15 jueces, 10 de las grandes potencias
centrales como EEUU, Francia, Inglaterra, Japón, China, Rusia, Italia,
México, India, Brasil, Nueva Zelandia y 4 países periféricos de
relleno), ubicada en una de las ciudades más cosmopolitas de uno de los
países más universales de Europa; con este fallo le ha mandado a la
dirigencia colombiana un mensaje de transnacionalización definitiva, que
los oligarcas dominantes ignoran o no han entendido: ¡Se integran de
forma directa al Caribe, o perecerán como clase opuesta al progreso!
Y en lugar de seguir mirándose el ombligo en Bogotá (la tenaz
suramericana) a dos mil seiscientos metros sobre el nivel del mar y
perder tiempo valioso en debates bizantinos y demagógicos; debieran
hacer desde ya lo que la realidad actual y futura ordena: una
integración de pequeñas patrias en una Patria Grande, como lo enseñó
nuestro padre Simón Bolívar.
Un acuerdo DIRECTO Y DEFINITIVO de
beneficio mutuo de los intereses colombianos con los nicaragüenses; por
ejemplo doble nacionalidad permanente para los sanandresanos y
raizales. Libre movilidad por todos los países confluentes. Explotación
petrolera conjunta de Ecopetrol y la empresa estatal de Nicaragua, junto
con otros países caribeños que deseen participar. Acuerdos mutuos
definitivos, permanentes y de largo plazo para la pesca, de
comunicaciones, aéreos, de seguridad, de comercio, etc y en fin, un
acuerdo de verdadero desarrollo Soberano para toda la Zona.
Pero no. Según la arcaica ideología latifundista de la intolerancia
dominante en Colombia, de resolver cualquier divergencia mediante las
armas y el extermino del contrario; la Oligarquía Vendepatria toca a
redoble el tambor de la guerra y el atraso del aislamiento
internacional, quizás hasta que una nueva configuración y alianza de
clases populares y progresistas entre a regir el destino soberano de
Colombia y, realice latan anhelada integración caribeña de la Patria
Grande.
Alberto Pinzón Sánchez es médico y antropólogo colombiano.
Patria Grande, o guerra colombo-nicaragüense
Written By Unknown on domingo, noviembre 25, 2012 | domingo, noviembre 25, 2012
Etiquetas:
feature,
latinoamerica,
ultimas noticias
Publicar un comentario