EDITORIAL ANNCOL
La anhelada Paz de Colombia está en boca de todos los politiqueros de los partidos oligárquicos. Todos ahora quieren hablar de paz, cuando hace dos años todos hablaban bien emocionados de la guerra de Uribe Vélez.
Todos esos “padres de la patria” se sentían unos “Rambos” y algunos hasta mataban a sus esposas con la pretensión de ocultar sus crímenes, igual que hacen las fuerzas militares-narcoparamilitares del Estado. Es que el mal ejemplo cunde en las altas esferas para esconder sus actos criminales. Unos para esconder sus violaciones de derechos humanos, otros para esconder sus vínculos al narcotráfico y la criminalidad y los “más avispados” para esconder ambas formas de delincuencia (Santoyo, Montoya, Parapolíticos, Uribe, etc.).
Roy Barreras |
Hoy vemos a los Roy Barreras hablando de Paz como una palomita. Hasta la Iglesia Católica se atrevió a meter la cucharada. Lo que demuestra que la Paz está en veremos es que todos hablan de ella, pero ninguno sabe como alcanzarla. La Canciller no sabe nada de eso porque ella está pendiente de otros menesteres, por ejemplo, de estar viajando a Venezuela a entrevistarse con su homólogo. El “pura dinamita” del ministro de Defensa mucho menos si ese anda es mirándose los músculos en los espejos.
Todos quieren embarcarse en el “tren de la Paz”, pero ni siquiera se conoce si el tren tiene máquina y mucho menos si el “piloto” es J.M. Santos. Eso del lado gubernamental. Porque del lado de la insurgencia armada sí se conocen quiénes son los pilotos y que proponen para que arranque ese tren.
De todo esto resulta la incertidumbre de si Santos tiene en su bolsillo la “llave de la paz” o si todavía está buscándola en el fondo del mar. Porque es que la oligarquía colombiana insiste y persiste en su idea equivocada de “vencer primero a la guerrilla para después buscar la paz”. El comandante de las fuerzas armadas estatales salió ésta semana con ese cuento manido de “vencer la insurgencia primero” y en eso llevan más de 60 años. Y siempre hemos insistido en que después de vencer la guerrilla ¿para qué la paz? ¿No es un contrasentido?
La paz se busca precisamente porque hay una confrontación, una guerra, y no es posible vencer a la insurgencia por la vía de las armas. Toca entonces realizar diálogos de paz para abordar las causas que dieron -y dan- origen al conflicto interno, es decir, buscarle una salida política civilizada.
48 años vivito y coleando. El Pueblo alzado en armas no ha podido detener ningún presidente en los últimos 60 años. ¡Que no cometa el mismo error como tus anteriores, Santos! |
Santos ha estado haciendo gárgaras con la Paz, pero no vemos hechos concretos. A menos que sea un “mensaje subliminal” haber enviado su hijo a prestar el Servicio Militar Obligatorio. Lo único cierto es la certidumbre de que la confrontación sigue. La guerrilla golpea todos los días a las fuerzas militares-narcoparamilitares, pero al tiempo expresa su indeclinable deseo de alcanzar la Paz. Las fuerzas militares-narcoparamilitares persisten en la violación de los derechos humanos de los colombianos en una paranoica persecución de la guerrilla, y la verdad es que no demuestra querer la paz.
La otra certeza es que el pueblo sigue sin participar de lo que le orienta el país politiquero. El pueblo colombiano no se deja manosear y dice: “La Paz se respeta”. Cuando haya un pronunciamiento y acciones serias por parte del gobierno en representación del Estado en favor de la Paz, será cuando las mayorías populares nacionales se movilicen para participar de los diálogos y discusiones. El pueblo ya no soporta otra traición como la que adelantó Pastrana en el Caguán.
ANNCOL, Bogota 2012-08-24
Publicar un comentario