Por: Agencia Prensa Rural
Sábado, 29 Diciembre 2012.
Luego de que empresarios y centrales
sindicales no lograran acordar un ajuste para el salario mínimo que rige
en Colombia, el gobierno fijó el incremento en un pírrico 4% para el
próximo año, muy cerca del 3,5% que ofrecía la burguesía nacional a los
trabajadores colombianos y muy lejos de lo que pedía la CUT (10%), la
CTC (8%) y la CGT (7,85%).
El salario mínimo para el 2013 seguirá siendo una miseria puesto que si bien la cifra del la inflación dada por el DANE la sitúa en el 2,65% en el 2012 (la real seguramente está por encima), el crecimiento económico del presente año en Colombia pronosticado por la CEPAL es del 4,3% y las grandes empresas se ganaron por decreto $8 billones en exenciones con la recién aprobada reforma tributaria que además aumenta los impuestos al salario de las capas medias.
El salario mínimo que devengan millones de familias quedará entonces en $589.500 con un incremento de $22.779 con respecto al 2012 mientras que las ganancias de Claro fueron de 2,8 billones, las utilidades de Pacific Rubiales de 2,3 billones y las del sector bancario que en lo corrido del presente año hasta el mes de octubre habían ganado 35 billones de pesos.
Con esto queda claro que son una falacia las declaraciones de Juan Manuel Santos, en las que afirma que es política del gobierno disminuir la inequidad que sitúa a Colombia en el tercer país más desigual del mundo. Con estas políticas, lejos de hacerlo, acentúa la brecha entre ricos y pobres y alimenta la guerra que el estado le declaró al pueblo colombiano desde siempre.
Publicar un comentario