Allende La Paz, NotiColombia Press
Se habían demorado en ”pelar el cobre” anti-comunista. Llegué a pensar que habían madurado y sobrepasado viejas épocas. Pero así como ”un fantasma reorre” Colombia, así también el imperio desempolvó su vieja receta: el anti-comunismo.
Un anticomunismo recetado por las agencias secretas del imperio. Esa receta que le ha dado tantos frutos.
Recuerdan las masacres de líderes verdaderamente revolucionarios de organizaciones de izquierda en Colombia? Recuerdan las ejecuciones extrajudiciales de personas que estaban en la clandestinidad y de pronto eran ubicados por los organismos secretos? Y como llegaban a ellos?
Naturalmente a través de los militantes seudorevolucionarios empotrados en tantas organizaciones.
Cuántos no fueron vendidos a los organismos secretos imperiales y nacionales? Cuántos líderes fueron comprados o cooptados por las agencias imperiales?
Siempre el expediente fue el anti-comunismo. Usado como excusa por los ”izquierdistas” infiltrados y por la derecha, es decir, sus organismos secretos. Tan aberrante era la cuestión que en los años 70 se decía que esas organizaciones estaban tan a la izquierda que se daban la mano con la derecha. Y así era.
Y siempre en ese batallar estaba la lucha del Partido Comunista Colombiano. Un Partido con una línea política correcta. Interpretación de la realidad concreta pensada y hecha para la revolución colombiana. Por ello todas las organizaciones de ”izquierda” se la copiaban, le cambiaban palabras y decían que esa era la línea, pero los copiadores practicaban el más atroz anticomunismo. Un anticomunismo rabioso, encendido, irracional.
Al verlos -moiristas, trostkistas, etc- barruntábamos que ese anticomunismo rabioso sólo puede provenir de un enemigo de clase. Y quién es el enemigo de clase de los comunistas? La derecha. La oligarquía, el imperio, y sus agentes. Por ello, los veíamos armados con palos, cadenas, tubos y hasta armas tratando de imponerles a los comunistas sus tesis que hoy la historia las ha colocado en su puesto. Copia falaz del verdadero Marxismo-Leninismo.
Hoy pelan el ”cobre”. Que lo haga la ”señora” Clara López se entiende. Es que ella es de la oligarca familia López. Que lo haga su esposo si no se entiende porque ese comía guineo sancochado con queso como única forma de matar el hambre que roía los estómagos de los pobres de Santa Marta. Que lo haga Robledo también se entiende... o por qué creen que la ”guerra sucia” de la oligarquía nunca los ha tocado.
Lo único que lamentamos es que nuevamente los enemigos de clase del pueblo -El imperio, Uribhitler, Santos- hayan logrado acabar con el POLO. Primero fue el Petro. Después los rosaditos. Y ahora la derecha disfrazada de izquierda.
Ya el POLO no les sirve y proceden a su entierro de tercera. Ya hicieron su trabajo. El POLO era la carta oligárquica para paralizar la lucha revolucionaria del pueblo. O para jugarla si el derrumbe del estado burgués era inminente. Han sembrado el desencanto en las masas populares, fieles a su tarea anti-comunista.
Esgrimen un argumento anodino. Todos en el POLO tienen doble y hasta triple militancia. Es el anticomunismo la causa para sus movidas. Ahora los López a su redil, como hizo el viejo López Michelsen. Ahora los Robledos a seguir gozando de un estatus dado por el pueblo, sin que la ”guerra sucia” oligárquica los preocupe. Por ello tantas entrevistas por los medios de comunicación en poder de la oligarquía. Por ello tanta parafernalia con la pretensión de contraponerla a los verdaderos luchadores revolucionarios, populares.
Pero a pesar de todas esas estratagemas, los comunistas, los verdaderos revolucionarios no necesariamente comunistas, están ahí firmes en primera fila de la lucha popular. Organizando. Unificando al pueblo. No comamos más cuentos. La revolución la hará el pueblo colombiano y no organizaciones mezcolanza de clases. La clase obrera, los campesinos, los estudiantes, los trabajadores, las mujeres del pueblo, avanzan en la creación de organizaciones verdaderamente populares.
Como nos dicen que debe ser los principios doctrinarios del Marxisno-Leninismo. Y eso les duele!!!
Nos asalta una pregunta: Por qué será que le temen tanto a Marcha Patriótica? Será que Marcha Patriótica es comunista? No. Es porque es revolucionaria, popular.
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